Waltari-Ugarte se adjudicaron las txapelas de Abadiño con mucho sufrimiento ante los pelotaris locales R. Uriarte-Antxia

Los cuatro finalistas dieron todo un espectáculo en Abadiño. Foto Federación Vasca

Preciosa final la vivida en la tarde-noche del viernes en el Tornosolo de Abadiño.  Los manistas locales pusieron toda la carne en el asador y estuvieron a punto de vencer a la máxima estrella del trinquete, el cubano Waltari. R.Uriate y Antxia se adelantaron 0-7, con un Waltari un poco confiado y relajado pero que pronto se dio cuenta de lo mucho que debía jugar para ganar. Las ventajas incluso aumentaron (24-12) sin que el cubano, ya  con su habitual potencia puesta en escena, pudiera romper la férrea defensa de los locales. Con el 17-34 a favour de los azules, las cosas comenzaron a cambiar. Waltari seguía machacando y los vizcaínos iban desinflándose debido al exigente partido que estaban disputando. Para más INRI, con el 36-28 en el luminoso, R.Uriarte se golpeó el suelo con la barbilla y se tuvo que retirar a vestuarios. Ese parón les perjudicó pues luego no supieron frenar al cubano que con el 37-37 iguales ya se vio ganador. El público que abarrotó el trinquete desfiló con un sabor agridulce, el que produce una gran final pero con derrota de pelotaris de la casa. Los cuatro realizaron un gran partido.

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