Injusto para los perdedores. Para cualquiera de las dos parejas que hubiera perdido el estelar hubiera sido injusto ya que los cuatro pelotaris, sobre todo los zagueros jugaron de forma brillante. Al final uno tenía que ganar y el duelo se decantó por la mínima a favor de Ezkurra y Aizpurua II ante Urriza y Agirrezabala.
El partido tuvo de todo y sobre todo emoción. Urriza y Agirrezabala mandaron la mayoría del tiempo el marcador, pero las diferencias nunca sobrepasaron los cuatro tantos. En el 15-19 y 17-21 cogieron los azules las mayores rentas y los clorados siempre se mantuevieron a uno o dos tantos. Siempre al acecho. Al inicio del partido sus mayores rentas fueron de 7-5 y 8-6 y a partir de ese instante solo hubo empates o diferencias mínimas a favor de los azules hasta casi el final del partido.
Volvieron a coger la delantera Ezkurra y Aizpurua en el 36-35, en el 38-37, en el 39-38 y en el 40-39 final. En el último tanto Ezkurra y Urriza intercambiaron pelotazos en los cuadros alegres y el tanto cayó del lado colorado, pero los grandes protagonistas de la contienda fueron los zagueros.
Bien Aizpurua y bien Agirrezabala fueron los dos mejores remontistas sobre la cancha. Jugaron como figuras, dándole, defendiendo, terminando tantos, reboteando… hicieron de todo y bien además fallando muy pocas pelotas. Al final del partido surgió la figura de Aizpurua y varias acciones brillantes del tolosarra decantaron la final. Antes había sujetado de maravilla el partido y al final puso la rúbrica ante un rival que no fue menos. Agirrezabala también jugó muchísimo y estuvo brillantísimo.
Ezkurra realizó 20 tantos y tres fallos y Aizpurua, siendo zaguero, hizo nada más y nada menos que once por solo dos errores y un tanto de saque, el 38-37 que les daba ventaja exactamente.
En los azules Urriza hizo también 20 tantos por cuatro fallos y Agirrezabala realizó once tantos al igual que Aizpurua II, además estuvo mejor en el saque con cinco tantos conseguidos, pero hizo una falta de saque en un momento decisivo cuando ganaban 36-37 que supuso el empate a 37.
Esos dos saques, el fallo de Agirrezabala y el tanto de Aizpurua, resultaron al final decisivos.