Arrasate-López se proclamaron brillantes campeones mundiales de cesta profesional (versión Consejo) al imponerse por 35-33 a Bereikua-Pradera en un impresionante partidazo que levantó de sus asientos al medio millar de entregados aficionados que se dieron cita en el Jostaldi de Hondarribia. Imanol López, el mejor pelotari del Campeonato del Mundo de cesta profesional, volvió a marcar la diferencia tras ofrecer una auténtica exhibición, aunque la oposición de sus rivales, especialmente de Bereikua, la otra gran estrella del Mundial, fue tenaz.
Lo cierto es que Imanol López conquistó su primer título mundial después de cuajar una final soberbia en la que sus bombazos causaron estragos en la defensa rival. Pese a ello, tuvo que sufrir porque sus rivales no se entregaron nunca, especialmente un Bereikua muy valiente y efectivo al resto –se anotó diez dejadas y otros dos tantos en las 16 ocasiones que pudo entrar al saque- equilibró la pelea, aunque el de Berriatua no pudo marcar la diferencia con su rebote y se quedó triste al quedarse de nuevo a las puertas del único título que se le resiste.
Ambos llevaron el peso, pero no jugaron solos, ni mucho menos. Arrasate, que acabó muerto, reboteó muy bien, se apuntó algunos remates y no sacó mal pese a las entradas de Bereikua. Pradera aguantó como pudo atrás el bombardeo y confirmó el buen nivel exhibido durante todo el verano en un partido que vivió numerosos tantos espectaculares e hizo las delicias del respetable.
Tras un inicio muy igualado hasta el empate a 8, López rompió el duelo con sus bombazos y Arrasate colaboró con una derecha picada al ancho para abrir brecha (8-15) y dejar el partido encarrilado. La cuarta dejada de resto –se apuntó 10 en total y otros dos tantos al resto- frenó la sangría y a partir de ahí Bereikua-Pradera cambiaron de pelota y fueron recortando diferencias, aunque siempre hicieron la goma, y no lograron empatar hasta el 31. Finalmente, el dúo de amigos que volverán a compartir piso en Miami en la temporada de invierno, acabó llevándose el gato al agua.
Foronda y Hernández se colgaron la medalla de bronce al imponerse con autoridad a García-Arriaga por 25-14. Sus rivales aguantaron el tirón hasta el 13-10, pero después fueron claramente superados por el dúo alavés.