Acabamos de llegar del Ogueta de Vitoria y todavía los momentos emocionantes se nos agolpan. Al margen del grandioso partido de Titín, en el que ha tenido a merced a un tremendo pelotari como Abel Barriola, hoy hemos contemplado al campeón de Tricio en esos momentos de que trascienden los deportivo. Ha finalizado el partido y se ha fundido en abrazos con sus hijos, su mujer, sus hermanos, Joaquín Plaza… y nos ha contagiado a todos los que estábamos en la cancha del frontón gasteiztarra. Después ha atendido a los medios, ha dado rueda de prensa, más entrevistas, fotos…En la rueda de prensa la congoja le ha abordado cuando ha dedicado parte de la txapela a su padre y no le dejaba articular palabra. En fin, que da gusto escribir sobre un campeón de la cabeza a los pies. ¡Aúpa Titín!