El partido imposible, una final entre delanteros y zagueros, se saldó el sábado pasado en el Galarreta con un encuentro de desarrollo y desenlace casi imposible, con alternativas en el marcador, tantos preciosos, errores de bulto, intercambio de posiciones y una remontada en el marcador digna de ser recordada durante mucho tiempo. Así discurrió la final del Torneo Thermotechnic, que coronó con las txapelas a los dos mejores zagueros del remonte profesional, Lizaso-Urrutia, ante los dos mejores delanteros, Zeberio II-Ezkurra (triunfo por 39-40 tras 73 minutos de juego).
El encuentro tuvo dos partes muy diferenciadas, ya que arrancó con claras ventajas para los delanteros (6-0, 12-5, 22-14). Ezkurra se mostró firme en ese inicio en la zaga, mientras que Zeberio II hacía a la perfección lo que mejor sabe, marcar las diferencias adelante. En el otro bando, el de los zagueros, el fallo en ese arranque estuvo curiosamente en la zaga, ya que Urrutia comenzó impreciso, demasiado empeñado en desbordar con su poderosa pegada. Cuando la desventaja era ya de 8 tantos (22-14), los zagueros aprovecharon una de las cláusulas de este original Torneo Thermotechnic, la de intercambiarse los roles en la cancha si el juego lo precisaba. Y así, con un Lizaso entonado con el saque e infranqueable en defensa, y un Urrutia rompedor en ataque, se fraguó una importante remontada con la que pocos contaban en el frontón.
Las diferencias se acortaron justo al final (del 35-27 al 35-33), en un rato en el que los zagueros consiguieron hacer daño por fin a Ezkurra en el rebote, una zona un tanto extraña incluso para el 9 veces campeón individual de remonte. Zeberio II era evitado una y otra vez, y así cambiaron del todo las cosas. La primera igualada de este movida final llegó en el 38-38, momento en el cual los zagueros se pusieron por delante por vez primera (38-39). En ese momento, Urrutia erró una pelota franca con todo a su favor, ante el asombro de todo el frontón (39-39). El desenlace del último tanto también fue de infarto, ya que al improvisado delantero se le volvió a escapar una pelota, con tan buena fortuna en esta ocasión que entró dentro y fuera del alcance de Ezkurra (39-40).
La txapela del campeonato es así para los zagueros, Urrutia y Lizaso, que han demostrado su calidad y polivalencia al intercambiado sus puestos tanto en la semifinal como en la final. En un caso vencieron con Lizaso como delantero (semifinal); y hoy lo han hecho con Urrutia de puntillero. Con todo, ambos tienen claro que donde realmente dan su medida como remontistas es los últimos cuadros, el verdadero terreno del zaguero.
Marcador: 6-0 / 6-4 / 10-4 / 10-5 / 12-5 / 12-8 / 13-8 / 13-10 / 15-10 / 15-11 / 16-12 / 18-14 / 22-14 / 23-16 / 24-17 / 26-19 / 27-20 / 29-21 / 29-23 / 30-25 / 31-26 / 34-26 / 35-27 / 35-33 / 36-33 / 36-35 / 38-35 / 38-38 / 38-39 / 39-39 y 39-40.
Uno a uno: Zeberio II acabó el partido con 18 tantos y 4 fallos; Ezkurra, con 13 tantos hechos (tres saques) y 7 errores; Lizaso, con 12 hechos (1 de saque) y 2 errores (una falta de saque); y Urrutia, con 17 hechos (1 de saque) y 6 fallos.