El presidente de la Federación Internacional de Pelota Vasca, Dominique Boutineau pudo constatar en un viaje a finales de año por Suiza e Italia que hay cierto interés por la pelota en estos dos países.
En Suiza hay un proyecto de trinquete y en Italia existe la Federación Italiana de Pallapugno. La FIP pertenece a una confederación internacional de juegos de pelota que agrupa a federaciones de Bélgica, Holanda, Irlanda, Valencia (Esp.), Colombia, Ecuador, etc. La FIP, que ha creado una sección de Pelota Vasca, tiene por objetivo desarrollar nuestro deporte para lograr una fuerte apertura internacional. Está afiliada a la FIPV y a la UFEPV, habiendo participado por primera vez en el Mundial de México 2006.
El Pallapugno se juega golpeando con la mano, protegida por un cubrimiento de cuero, una pelota de goma de 100 gramos. El terreno hace 90 metros de largo por 18 de ancho y lleva una pared en uno de los lados. Los equipos, compuestos por 4 jugadores, juegan frente a frente. Este juego contempla la posibilidad de 4 “cases” y se disputa a 11 juegos (15-20-40).
La FIP está afiliada al Comité Olímpico Italiana, cuenta con 1.200 licencias y está implantado sobre todo en la región de Piemonte.
Un derivado del Pallapugno se juega en pista cubierta, en un terreno más pequeño. También se hacen adaptaciones para los jóvenes con pelotas más ligeras.
Hay otra especialidad que se juega en la misma instalación llamada “Tamburello”, llevada por otra federación diferente.
El objetivo es construir un primer frontón reglamentario, existiendo a tal efecto un proyecto para la ciudad de Grana (70 Km. al norte de Turín).