Así de espectacular es el titular de hoy en El Correo. Tino Rey nos pone al día sobre la normativa de la LEP.M en cuestión de antidoping y de micciones. De todo ello ya se hizo eco el 29 de diciembre Luis Guinea en el Diario de Navarra. De todas formas hay una cosa que no me cuadra: que las empresas (LEP.M) sean las encargadas de pasar los controles en vez de un organismo independiente (por ejemplo, en Pamplona el Instituo Navarro de Deporte y Juventud, cuyos especialistas médicos acuden a mundiales y olimpiadas para esa cuestión). Aquí también la pelota is diferent. ¿Se imaginan al Liberty Seguros o al Euskaltel realizando los controles a sus corredores?
¿Por qué esta singular medida? Se han dado varios casos en que las pruebas de orina realizadas a deportistas en los laboratorios han dado unos resultados neutros. Se descubría, para sorpresa generalizada de los médicos, que el análisis era «completamente nulo». La razón: se había alterado previamente la orina. ¿Cómo? Se ha llegado a la conclusión de que, unos minutos antes de pasar el test, algunos deportistas podrían haberse introducido en las uñas unos polvos para desvirtuar la prueba. A la hora de orinar arrastran con el fluido la sustancia depositada en los dedos con el objetivo de que el análisis sea inservible