El sábado jugará la final, su último partido profesional en Hegoalde
Además del aliciente propio que tiene la final del sábado en el Jostaldi (18.00 horas) entre Irastorza-Erkiaga y Barandika-López, será una jornada especial porque significará el último partido de Eric Irastorza como pelotari profesional en Hegoalde.
El de Bidart, con 46 años y un extenso palmarés en el que destacan cinco títulos de campeón del mundo (y otros dos en aficionados) más diez Guantes de Oro, ya ha puesto fecha a su retirada, tras el Mundial de Biarritz que se disputa a finales de este mes.
-¿Cómo vio la semifinal? Desde fuera pareció un partido duro.
-La verdad es que fue bastante duro. Sabíamos que Goiko-Zabala forman una pareja sólida, además Goiko en muy buen estado de forma, si le dábamos la pelota íbamos a tener problemas. Al final ganamos en dos sets muy apretados (15-13 los dos) pero creo que sacamos nuestro juego y salió todo bien.
-Aritz Erkiaga es una garantía en los cuadros de adelante. ¿Cómo se entienden?
-Jugar con Aritz es una garantía, te da mucha seguridad. Yo intento ayudarle y buscar una buena posición para que desarrolle su juego al cien por cien.
-En la final se verán las caras con Barandika-López, pareja sólida. ¿Cómo lo ve?
-Va a ser un partido muy complicado, contra una pareja que nos ganó en la liguilla. Pero eso ahora no cuenta y en una final puede pasar cualquier cosa. Buscaremos nuestros puntos fuertes y estamos con confianza.
-Su último partido en Hegoalde va a ser en la final de un torneo donde han jugado los mejores pelotaris… Parece el colofón perfecto.
-Tengo mucha ilusión y alegría de que mi despedida en Hegoalde sea de esta forma. Tengo que agradecer a Mikel Egiguren de Jai Alive que me incluyó en este campeonato. Me hubiera gustado jugar también en Markina y Gernika pero no pudo ser. Voy a intentar disfrutar de los días que quedan hasta el sábado y de la propia final.
-El sábado juega la final y, si gana con Erkiaga, sería un final soñado ¿no? Último partido, ganar al mejor zaguero de hoy en día…
-Si conseguimos la victoria, será algo impresionante. Jugar en Hegoalde ha sido una oportunidad durante muchos años. Para mi era importante hacerse un nombre allí y lo conseguí dentro y fuera de la cancha
-¿Qué siente en su interior estos últimos días antes de jugar sabiendo que cuando acabe el Mundial dejará la cesta punta profesional?
-Siento muchas cosas positivas, porque con todo lo que he pasado con mis operaciones de cadera y con los últimos cuatro años difíciles como deportista de alto nivel, me había puesto el objetivo de volver y de estar a buen nivel y lo he conseguido. Voy a poder acabar en el Mundial de Biarritz que también va a ser muy especial.
-¿Qué le ha dado la pelota? ¿Y qué cree que ha aportado a este deporte?
-Me ha dado mucho. Primero un trabajo, pero no es lo más importante, porque por encima de eso estaba la pasión por la pelota. Me ha dado la oportunidad de viajar, de conocer distintas culturas, mucha gente… Me ha dado mucho, bastante más de lo que yo pensaba y me siento en deuda con la pelota. Siempre intenté dar una buena imagen, siendo buen profesional, cuidando cuerpo y mente. Le he dado bastante y por eso tengo el nombre que tengo en la pelota y la gente lo ve. Pero tengo que dar más todavía. Seguiré ligado a este deporte que es mi pasión y que está en mi sangre.
-¿Es consciente de que va a pasar a la historia como uno de los mejores zagueros que ha tenido la cesta punta?
-Ser parte de los mejores zagueros de la historia es un título que, sinceramente, a los quince años cuando empecé no pensaba tener. Siempre he querido ganar, ser un buen ejemplo para los jóvenes y desarrollar nuestro deporte a través de mi imagen o de los sponsors. Me da mucha alegría y mucho orgullo, pero hay que tomarlo con humildad porque sé de dónde vengo y todo lo que he trabajado. Los jóvenes tienen que saber que no vale con tener cualidades, sino que hay que trabajar mucho. Si te gusta, ya harás los sacrificios y vendrá la recompensa.
-¿Qué título de los que has ganado recuerda con más alegría?
-Curiosamente no tengo un título preferido. Cada uno tiene su significado. Por el momento, por el compañero… Con Iñaki Goikoetxea gané un Mundial de quinielas que fue muy especial, hay títulos de aficionados, el primero de profesional con Etchalus en Gernika… Pero todos los títulos tienen algo y hay que disfrutarlos porque no sabes si vas a ganar más.
-¿Qué le diría a los jóvenes que están jugando a pelota y tienen un sueño de ser pelotaris? Un mensaje final.
-Lo primero, que hay que disfrutar del deporte. Se convierte en un trabajo pero es sobre todo una pasión. Hay que trabajar mucho y a veces sacrificar cosas, pero es el camino.