El de Goizueta está mostrando un juego brillante, pero no se siente favorito y afirma que lo más importante el domingo «es que se vea un buen partido».
Juan Luis Ibarretxe / Deia
Aimar olaizola ha dejado en el olvido el calvario sufrido con las lesiones y se encuentra listo para pelear por el trono de la «jaula» que ya alcanzó en 2002, precisamente con Barriola como adversario.
De nuevo en una final.
Sí, he pasado una temporada bastante mala por culpa de las lesiones, pero últimamente estaba jugando muy a gusto.
Su sueño de conquistar los tres títulos aún sigue intacto.
Sí, tengo el de la «jaula» y ya he disputado las finales del Parejas y del Manomanista, pero no las he ganado. Espero lograr estas txapelas, aunque ahora sería muy importante conquistar la segunda del Cuatro y Medio.
¿Se repetirá este Barriola-Olaizola II muchas veces?
Yo estaría encantado porque somos amigos.
¿Qué puntos débiles y fuertes mencionaría de su rival?
Débiles pienso que tiene pocos, ya que él es muy completo. Para ser zaguero, posee un gran saque, termina muy bien, anda mucho en la cancha y tiene buena pegada con las dos manos.
Y los puntos fuertes de Aimar, ¿cuáles son?
Eso lo tendrán que decir otros. Yo, a bote, ando a gusto y también estoy acertando a la hora de rematar.
¿Después de su última final, en 2002, ya tendría ganas de disputar otra?
Sí, a todos nos gusta estar aquí arriba. Esto ya es un premio y, si gano, pues mejor todavía.
¿Guarda una espina de aquel partido contra Patxi Ruiz?
En el primer tanto sufrí de nuevo la rotura de fibras, pero eso pertenece al pasado y ya está olvidado. Lo importante es el presente, que ando con ganas de que llegue el domingo y de completar un buen partido.
¿Cree que Barriola acusará las molestias de las manos?
No, el día de Tolosa le noté muy recuperado y sólo contó con nueve días para curarse. Ahora, con tres semanas, estará en condiciones, pero a estas circunstancias no les doy importancia, yo prepararé lo mío y saldré a tope .
En las últimas fechas se ha visto que usted está en forma y que ha olvidado las lesiones.
Sí, se está notando, porque si estoy en la final es por algo, si andas mal, no te clasificas.
Al principio no esperaba llegar tan lejos en esta edición.
No, llevaba un mes inactivo por un esguince y tenía miedo. Entonces declaré que lo más importante era no lesionarme y ganar el primer partido, pero luego he ido adquiriendo confianza poco a poco.
¿El encuentro de la liguilla en el que se midió con Abel puede servir de referente para el domingo?
Para nada. Todos los partidos son distintos y aquella vez gané yo, pero ahora, para firmar el triunfo, deberé andar muy bien.
¿Su rival acusó entonces el golpe sufrido en las costillas?
Sí, en el Ogeta será diferente.
Usted partirá como favorito.
A eso no le hago ni caso. Aquí hay que jugar y si hiciéramos caso a los pronósticos, no haría falta que saliéramos a la cancha. El duelo está al cincuenta por cien y tendré que ir a por todas.
¿Prevé una final parecida a la que protagonizaron usted y Barriola en 2002?
Ya me gustaría, por lo menos en cuanto al resultado, je, je. Cuando nos hemos enfrentado siempre se han visto partidos buenos y habrá un buen ambiente. Eso es lo más importante.
¿Suele mantenerse tranquilo en las finales?
Sí, en la cancha siempre hay algo de nervios, pero yo soy bastante tranquilo.
¿Su rutina variará algo el día antes del choque?
No, haré lo mismo que la víspera de cualquier encuentro, descansaré y estaré tranquilo en casa.
¿Le gusta ir al monte a desconectar?
Sí, pero es que eso es algo que hago todos los días. Me encanta y lo seguiré haciendo.
Usted conoce a Barriola desde hace mucho, ¿verdad?
Sí, no sé desde cuando, pero desde que yo tenía once o doce años. Jugábamos de pareja.
Serían imbatibles.
No sé, en profesionales no recuerdo haber jugado junto a él. A mí me encantaría, pero lo veo difícil porque pertenecemos a diferentes empresas.
Pero no me ha dicho si eran imbatibles.
Bueno, ganábamos muchas veces, pero también perdíamos algunas, es normal.
¿La sidrería que ha cogido con su hermano ya estará lista para el domingo?
La abriremos más tarde, pero igual sí que ese día vamos a cenar allí la familia y los amigos.