«Cuando juegas bien descargas mucha adrenalina y te lo pasas muy muy bien»
Mikel Etxarri Elizalde (38 años) debutó como profesional un día de Nochebuena en 2016 y tras siete años y cuatro meses jugará el sábado su último partido como profesional. Junto a Martirena se medirán a Goikoetxea V y Zubiri, en el partido que pondrá punto y final a su trayectoria como remontista profesional. Precisamente el debut de Etxarri tuvo a los mismos protagonistas. Eso sí, con las parejas intercambiadas, ya que Etxarri jugó junto a Zubiri y se enfrentaron a Goikoetxea V y Martirena. Aquel día Etxarri y Zubiri ganaron 40-37.
Han sido siete año intensos para Etxarri. «Vamos a terminar una etapa». Su trayectoria como profesional ha tenido altibajos sobre todo debido a las lesiones. «Al principio, al ser todo nuevo, tienes muchas ilusiones y quieres aprender. Luego llegó una etapa en el que disfrutaba, pero también tienes días malos. Ahí ya quieres competir un poco más, tienes hambre y la verdad que a veces en los campeonatos se me ha hecho algo cuesta arriba. He tenido tres o cuatro lesiones, la última más importante, que me han impedido jugar a gusto los campeonatos. Tengo un sabor agridulce en cuanto a la competición».
En cuanto al juego Etxarri ha disfrutado mucho. «He disfrutado mucho, aunque me queda una espinilla clavada porque podía haber dado mucho más».
Cuando llevaba tres años y unos meses como profesional llegó la pandemia que lo condicionó todo. «Así fue. A partir de la pandemia, en marzo de 2020, no jugamos apenas partidos y perdimos un poco el ritmo de competición. En 2021 fui padre y estuve con permiso da paternidad. Volví a los frontones y me lesioné en el Erremontari el tobillo teniendo que parar ocho meses. Cuando regresé volví a ser padre. Los dos últimos años han sido caóticos e irregulares porque no he podido jugar mucho».
Mikel Etxarri guardará un recuerdo muy especial de los compañeros del vestuario de Galarreta. «El vestuario es excepcional. Con cualquiera de los compañeros del cuadro puedes estar a gusto riéndote antes y después d eun partido. Había un ambiente muy bueno. Dentro de la competición me quedó con varios campeonatos. El jugar los de primera como en el Erremontari han sido buenos recuerdos como por ejemplo con Ion Arrizabalaga. También las txapelas que gané con Labaka y Garcés. Con Labaka gané el campeonato de promoción y con Garcés el San Fermín de promoción».
Las lesiones sufridas son el peor recuerdo. «Me fastidió mucho porque estaba jugando bien en el Erremontari, pero es ley de vida. En el deporte las lesiones son parte del juego».
Etxarri llegó al remonte de la pala, aunque la cesta no le era ajena. «Empecé a jugar a remonte de pequeño, pero lo dejé y empecé a pala. Estuve ocho-nueve años jugando a pala, pero tenía el gusanillo de poder volver al remonte. Me picó Javi Urriza un poco y también empezó a jugar mi primo Xabi Erburu».
El remontista de Luzaide no tiene duda que merece mucho jugar al remonte. «Engancha. Es un deporte super agradecido cuando juegas bien y desagradecido cuando juegas mal. Cuando no juegas bien estás descolocado y parece que no sabes jugar, pero cuando estás bien descargas adrenalina y te lo pasas muy muy bien. Imagínate si merece la pena que hacemos muchos kilómetros solo para entrenar».
Mikel Etxarri ha jugado muchas modalidades de pelota y asegura que quizás el remonte es el que peor se le ha dado. «Por eso sé que podía haber rendido más. Me ha lastrado la irregularidad que he tenido. A remonte es difícil estar encanchado y la técnica también es complicada, pero merece mucho la pena».
El sábado se despedirá del profesionalismo y allí estarán la familia, los amigos y los que han estado junto a él estos años de profesionalismo animándole una vez más.