JH/LG/Diario de Navarra
Abel Barriola sigue caminando por el mejor de los trazados. Conserva su frescura y asegura su confianza. Es un pelotari recuperado para las opciones más altas de la competición. Esa es la mejor y acaso la única conclusión que se sacó ayer en el Labrit. El leitzarra resolvió su compromiso con Esáin por 22-10 y se encontrará en cuartos con Titín.
Notable fue la diferencia pero aún fueron más concluyentes las evidencias técnicas en la cancha. Esáin se adelantó con un 0-1 gracias a una inesperada pasa de Barriola. El de Leitza rectificó luego con una dejada primorosa en el ancho. Fue un prodigio de toque. El propio Esáin respondería con otra más larga pero igualmente perfecta. Pero ese comienzo interesante duraría lo que un azucarillo en un taza de agua caliente.
Esáin concedería el 2-2 tras fallar de zurda y Barriola comenzó a ser muy superior. Asentado en la cancha, serio y sin frivolidades, fue despegándose en el marcador en un rato en el que entraron tres saques (dos de ellos restables), una volea, una dejada y otro par de errores muy claros del burladés. Del 2-2 se pasó al 10-2. Y aunque Esáin emergiera provisionalmente en el 4-11 y 6-12, el mando y la iniciativa estuvieron siempre en la mano del de Leitza. No se salió de un guión que aparentemente parecía plano pero que tenía su sentido.
Barriola movió siempre al rival y provocó muchos de sus fallos (nueve muy claros). Del 14-6 el de Leiza se estiró hasta un 18-8. Hizo el 21-9 con su último tanto de saque, Esáin se lució con un voleón (21-10) y la historia acabó con el 22-10 definitivo.
Barriola dominó de punta a cabo a un Esáin que concedió (en muchos casos forzadamente) muchísimos regalos. El de Burlada pudo intentar muy pocas cosas, encajó demasiados saques, hizo una falta con el disparo inicial y cometió una pasa además de sus nueve errores. Barriola se encontró el menú medio servido y se enfrentará en cuartos de final a Titín III. Le dará más guerra que Esáin.