Frenético y de aire

Martínez de Irujo e Yves Xala explican qué tipo de partido esperan en la final de mañana
Mano a mano, su único precedente fue un encuentro de ‘tacadas’, juego ofensivo y triunfo del navarro
Pablo Almárcegui / La Estafeta de Navarra

Resulta muy complicado prever cómo se desarrollará la final manomanista de mañana, pero todo apunta a un partido de ritmo frenético, de continuo juego de aire y tantos duros y muy peloteados. El juego desplegado y las trayectoria de Juan Martínez de Irujo y de Yves Xala durante todo el Manomanista invitan a esperar una final atípica, entre dos pelotaris sin paciencia para el juego en largo y a bote.

«En el mano a mano está todo inventado, se trata de dominar y de acabar el tanto», explica Martínez de Irujo. «Nos plantaremos en el cuadro cinco o en el seis y trataremos de darle de aire a todas las pelotas. A la hora de terminar el tanto, como los dos estaremos muy adelantados, habrá que ajustar mucho la pelota», indica el pelotari de Ibero.

Yves Xala también realiza una clara declaración de intenciones. «Lo que tengo que intentar es alargar el tanto y sufrir en la cancha. Si no funciona, ahí está el botillero para cambiar de táctica, y aconsejarme cómo jugar, como hace habitualmente. Sé que Irujo le da mucho ritmo a los partidos, pero estoy preparado para jugar un partido muy duro», señala Xala.

El 22-15 de Gernika. Existe un buen precedente para saber cómo se desarrollará la final, el partido de la liguilla de semifinales, disputado el pasado 24 de abril en Gernika. Ese día, Martínez de Irujo se impuso por 22-15, en un partido de 261 pelotazos e importantes tacadas: Irujo perdía por 2-1 y remontó hasta el 2-8; Xala respondió con un 10-8; Irujo hizo entonces diez tantos consecutivos, 10-18; y se intercambiaron tres veces más el saque, hasta alcanzar el referido 15-22.

El partido supuso un recital de tantos muy disputados y de juego de aire. Y hubo dos claves en el triunfo de Irujo: el saque (seis tantos por los tres de Xala); y sus superiores recursos para resolver el tanto (diez de Irujo por seis del pelotari francés).

«Xala y yo casi no le dejamos botar casi a la pelota, y creo que la final será un partido muy parecido. Es muy duro jugar así, pero es una ocasión única y habrá que sufrir a tope», explica Irujo, que tenía previsto ver ayer el vídeo de aquel partido de la liguilla.

Por su parte, el delantero de Iparralde aseguró que ya ha estudiado aquel encuentro, aunque recalca que «cada partido es diferente». «Cometí varios errores, y está claro que hay que mejorar algunos aspectos, pero después es difícil, porque cuando estás cansado las ideas se te van. Pero bueno, aunque Irujo ganó aquel partido, creo que estuvo bastante igualado», subraya Xala.

Un día distinto. Los dos pelotaris destacan la particularidad del día de la final, en la que entrarán en juego otros aspectos. Y al respecto, Irujo recuerda su amarga experiencia en la final del Mano Parejas de este año, en la que cayó junto a Lasa ante Titín-Goñi III. «Espero que no me pase como aquel día, porque jugué muy precipitado… me venía la pelota y quería hacer mil cosas. Quiero jugar más relajado. El mano a mano es diferente, además», concluye.

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