“Al principio salí a jugar muy enfadado” Olaizola I

Asier Olaizola reconoce que estaba enrabietado por el material

Karmelo Anabitarte  / El Mundo Deportivo

Asier Olaizola empezó ayer a creerse que es semifinalista del Campeonato por Parejas. Tras la agria polémica por el material que debe llevar a una profunda reflexión a los organizadores de las competiciones denominadas oficiales, el hermano mayor de la saga goizuetarra muestra su satisfacción y sorpresa por la remontada firmada contra viento y marea, con Zearra, ante su hermano Aimar y Otxandorena anteayer en el Labrit de Pamplona. “Sabíamos que teníamos un partido difícil. Poca gente o casi nadie pensaba que podíamos ganar. Además, el partido se nos puso muy cuesta arriba con el 12–3, pero afortunadamente, cambiamos de táctica a tiempo y al final pudimos sacar el partido adelante”, señala.

Asier, campeón por parejas en 1999 y 2001 y subcampeón en 2002, reconoce que la polémica por el material afectó a su forma de afrontar el desempate: “Salí a jugar demasiado enfadado. Al principio vi que no hacíamos mucho daño con el material que había. Me la jugué un par de veces y me salió el tiro por la culata. Ellos, en cambio, firmaron una primera parte sobresaliente”, confiesa el giuzetarra, que añade que “en el cestaño había lo que sabíamos que había. En el 12–3 vi que la única forma de optar a la victoria era endureciendo el partido. Lo intentamos y nos salió bien”.

Asier no comparte alguna lectura que se han hecho sobre la influencia que tuvo el material en el desenlace del choque: “Sigo pensando lo mismo que el miércoles. En el partido se vio claramente que había tres o cuatro pelotas que andaban bien en el suelo, pero todas eran pelotas sin mucha salida de frontis. Comparando el material con encuentros anteriores, ha habido una rebaja importante en cuanto a la salida de frontis”.

Y añade que “he leído que ganamos con la pelota que no habíamos elegido, pero me gustaría aclarar que esa pelota la sacamos por primera vez en el tanto 14 ó 15. La pusimos en juego porque era la única nueva que quedaba en el cestaño. Todas las demás estaban gastadas y esta era la única que tenía algo de brillo”.

El goizuetarra está encantado de jugar con Zearra: “Oier firmó un partidazo de inicio a fin en el Labrit. Al principio cometió un par de errores, pero cualquier zaguero firmaría conceder sólo dos regalos en un partido de más de mil pelotas a buena”.

Ya piensa en las semifinales: “El primer objetivo está cumplido porque nadie pensaba que pudiésemos estar ahí. Estamos haciendo un campeonato bastante bueno, aunque nos ha tocado cruzarnos con la pareja que para mí es favorita para lograr las txapelas. Irujo es rematador, pero no sólo. A bote pega tanto como yo. Quizá le falta regularidad, pero es capaz de resolver los partidos él solo. Por si fuera poco, tiene atrás a un zaguero como Fernando que está con chispa y no falla una”, señala

© Pelota Vasca - Manista. Diseño: iLUNE