Nueve duplas navarras se han llevado el parejas en trece ocasiones
Si Irujo y Goñi logran colarse en la final se romperán cuatro años de sequía
Chema Oroz / Diario de Noticias
Todo queda en manos de Juan Martínez de Irujo y Fernando Goñi. Ellos tienen en su mano la posibilidad de sumar la 14ª victoria navarra en el Campeonato de Parejas. Tras años de dominio foral en todas las especialidades -por poner un ejemplo, 11 de los 16 participantes de esta edición son navarros-, la oportunidad de colocar en lo más alto a una nueva dupla navarra está cerca. La última hazaña data de 2001, y lo consiguieron Asier Olaizola -que el domingo apurará sus opciones de colarse en la final- y Fernando Goñi -que será su rival en el Ogueta de Vitoria-. Ambos lograron doblegar a Alústiza y Beloki (22-13) y trajeron las dos txapelas hasta Navarra.
Aunque en las últimas tres ediciones del Parejas no ha podido triunfar una dupla 100% navarra, Lasa III (2002), Beloki (2003) y Goñi III (2004) han garantizado la presencia foral en el reparto de las txapelas.
La clasificación de la semana pasada de Oinatz Bengoetxea y Rubén Beloki para la final puede acabar colocando a cuatro pelotaris navarros en la final. Un logro muy importante y que encuentra su precedente en la edición de 1991, cuando Retegui II y Arretxe se hicieron con el título tras doblegar a Salaberria y Galarza III (22-19).
Todo empezó en 1978 Pero hay que remontarse en el tiempo para conocer a la primera pareja navarra que firmó la victoria en el Campeonato de Parejas. Piérola y Maiz II inscribieron su nombre en el libro de los ganadores y abrieron el camino a doce triunfos forales en algo más de dos décadas, tras suceder en el trono a los hermanos guipuzcoanos Arriarán, que vencieron en la anterior edición de 1961.
Desde entonces, varias parejas han repetido. Bengoetxea IV-Maiz II (2), Vergara II-Martinicorena (2) y Retegui II-Errandonea (3) han garantizado el dominio navarro en los últimos años. Ahora, cuatro años después del triunfo de Olaizola I y Goñi III, los aficionados navarros pueden volver a disfrutar de un triunfo netamente navarro. El capítulo decisivo hacia el éxito se celebra este domingo. Después, tan sólo puede tocar disfrutar.