El Astelena, un frontón talismán

Olaizola I y Zearra acaban la liguilla imbatidos y dando una buena imagen tras ganar de nuevo en La Catedral Gonzalez y Pascual, muy irregulares, regalaron mucho
ENRIQUE ECHAVARREN./Diario Vasco

Asier Olaizola y Oier Zearra se aseguraron ayer en el Astelena de Eibar el liderato del grupo B del Campeonato de Parejas al derrotar a Sebastien Gonzalez e Iñigo Pascual por 22-18. La pareja de Asegarce sigue imbatida y tendrá como rivales en la eliminatoria de cuartos a Aimar Olaizola e Iñaki Otxandorena, últimos del grupo A. Ese es el único cruce que está confirmado. Para el resto habrá que esperar al resultado que se produzca esta tarde en el Beotibar de Tolosa. El morbo está servido con el duelo entre los hermanos Olaizola. Al menos uno estará en semifinales.

Asier Olaizola y Zearra jugaron un partido muy serio y volvieron a dar una imagen de solidez en la cancha. Su victoria fue justa y merecida una vez más. Hay que contar con ellos. Ambos tenían muchas dudas al inicio del campeonato, salían de sendas lesiones y su rendimiento era una incógnita. Algunas de esas dudas ya se van despejando. El goizuetarra y el galdakoztarra han adquirido el rodaje necesario, se compenetran cada vez más y, lo que es más importante, no han sufrido ningún contratiempo físico. Están frescos de golpe. Sus tres partidos los han jugado en el Astelena y en todos han salido airosos. A este paso, la catedral de la mano se va a convertir en un frontón talismán para sus intereses.

El partido no fue bueno, pero al menos no se alargó en el tiempo. En poco menos de una hora y con 503 pelotazos, la pareja de Asegarce solventó la contienda. Gonzalez y Pascual estuvieron muy irregulares, sobre todo el zaguero de Abartzuza, que cometió media docena de errores de bulto. Los mismos que el zurdo de Askain, pero al menos éste los compensó con siete tantos ganadores -sobresalió un voleón tremendo que supuso el empate a 18- y cuatro saques. Entre ambos subieron doce tantos al marcador de sus rivales. Con esa rémora es muy complicado ganar un partido. Y más ante una pareja que comete muy pocos errores y que pelea cada tanto como si le fuera la vida en ello.

Gonzalez y Pascual cuentan con un poder tremendo en sus manos, pero quizás aún no son conscientes del potencial que atesoran. Lo muestran a cuentagotas y en este campeonato lo importante no es maravillar un día, sino mantener una regularidad.

De nuevo el Astelena volvió a registrar una pobre entrada. No más de 150 personas se dieron cita en las gradas del histórico frontón eibarrés. Tampoco es de extrañar si se les ofrece un esperpento como el que tuvieron que soportar en el primer partido. Del Rey y Eulate dejaron en cinco a Chafee y Galarza VI. Estuvieron ganando 18-1. El zaguero de Lemoa no tuvo su tarde.

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