A sus 42 años, el zaguero José Mari Zezeaga ha visto cómo Aspe no le ha renovado el contrato | Probará una temporada con la empresa riojana Garfe
P. A. / La Estafeta de Navarra
Ha sido, durante los últimos 23 años, el paradigma del zaguero clásico: un muro pétreo en defensa, con una derecha potente, zurda llevadora y, sobre todo, paciencia y resistencia para devolver al frontis pelotazo tras pelotazo, por muy violentos o dirigidos que fueran. Se trata de José Mari Zezeaga Elorza, el mítico zaguero de Bergara que, a sus 42 años, se ha visto obligado a abandonar los frontones industriales. Su empresa, Aspe, no le ha renovado, y Zezeaga jugará ahora en festivales de menos relumbrón dentro con Garfe, con la que ha firmado por un año. Debutará el lunes, en Cintruénigo (posiblemente, con Camarero como compañero y Mikel-Galarza IV como rivales).
«No me lo esperaba. Creo que sigo dando un buen rendimiento en la cancha, pero me han dicho que prefieren dar paso a otros zagueros más jóvenes», explica un Zezeaga resignado, aunque poco convencido con ese argumento. «Joven joven prácticamente sólo tienen a Zubieta, los demás están ya en la treintena. A un pelotari que lleva seis años en profesionales ya se le ha visto qué puede ofrecer», sentencia.
Aventura a los 42. Pese a esta amarga sorpresa, Zezeaga ha decidido continuar en activo, aunque eso suponga entrar en un mundillo desconocido. «Tengo lo más importante para seguir jugando, ilusión, pero me da un poco de miedo entrar en Garfe. Es algo muy distinto. No sé en qué condiciones jugaré: si los frontones estarán en buen estado o no, si el material será adecuado… De todos modos, me gusta muchísimo jugar a pelota y hacer deporte. Si no era en Garfe, hubiera seguido de otra forma», apunta.
El guipuzcoano hace revista a su larga trayectoria, siempre marcada por una tónica: los partidos por parejas. «En eso, la pelota ha cambiado mucho. Cuando empecé, tan sólo jugaban mano a mano cinco o seis pelotaris: los que tenían opciones muy claras de ganar, o los que se sentían cómodos en la modalidad», explica. Él lo intentó «durante dos o tres años», pero pronto lo dejó. Y así comenzó la larga andadura de uno de los rostros más populares del Campeonato de Mano Parejas. Un torneo que, curiosamente, nunca ha ganado, «sólo uno que hicimos en Empresas Unidas», apunta el manista, que ha sido subcampeón en cuatro ocasiones.
22-21 tras dos horas. Zezeaga tiene multitud de partidos para el recuerdo, pero se queda con dos. Uno, su debut, «el momento más ilusionante. Tenía todo un mundo por delante. Luego lo asimilas y ves cómo funciona todo, pero dudo que haya un día más feliz para un pelotari», dice. El otro encuentro lo rescata por su dureza: «Jugué con Nagore contra Alustiza-Errasti, y ganamos por 22-21 después de dos horas. Fue en el Campeonato de Parejas que ganaron Capellán y Beloki –1996–».
Los partidos con Unanue. A lo largo de estos años ha tenido multitud de compañeros y de rivales. Entre los primeros, destaca a Mikel Unane, con el que ha compartido miles de minutos en las canchas. «Hemos hecho grandes partidos», asegura. Como rivales más fuertes, señala a los de su época, «Errandonea, Arretxe, Alustiza y Retegui», y añade que, a su juicio, el de Eratsun no ha sido el mejor delantero por parejas: «En en el mano a mano y en el cuatro y medio nos sacaba un cacho a todos. Pero por parejas, me quedo con Titín III y Aimar Olaizola».
En cuanto a las canchas, Zezeaga se queda con el Adarraga de Logroño. «Es el que más me gusta. El suelo no es lento, pero la pelota no arrolla. Casi perfecto», asegura.
Para él, que ha vivido el día a día de la pelota durante las últimas dos décadas, lo que más ha cambiado ha sido la repercusión. «Entró la televisión, y la prensa nos hace más caso, aunque también hay que decir que ahora va menos gente a los frontones industriales», resalta. «En el juego apenas ha habido cambios. Si acaso, el material es un poco más fuerte que cuando empecé», concluye el Muro de Bergara.
Sus datos. José Mari Zezeaga Elorza, zaguero. 42 años (nació en febrero de 1962, en Bergara).
Palmarés. Cuatro subcampeonatos de Parejas (1992, 1995, 1996 y 1999).
Trayectoria. Debutó en abril de 1981 con Empresas Unidas. Desde entonces, siempre ha estado vinculado profesionalmente a dirigentes de esta promotora: en Alti, en primer lugar, y en Aspe después, con la cual concluyó hace poco su contrato.
Ránking. En la actualidad ocupa el puesto número 28 en manista.com, con un 56,86 por ciento de triunfos en 2004.
El futuro. Ha firmado por una temporada con la empresa riojana Garfe.
Otras novedades en Garfe
El fichaje de Zezeaga por la empresa Garfe coincide con una serie de movimientos dentro de la promotora riojana. Los delanteros Garrido V, Camarero II, Otaegi, Etxaniz II y Mikel han prorrogado sus contratos por tres años más, lo mismo que han hecho siete zagueros, Matute III, Sainz II, Imaz, Galarza IV, Errandonea III, Almandoz y Sukia. Por el contrario, tres pelotaris veteranos como Martínez, Tripita II o César III no han sido renovados.
De esta manera, Garfe se asegura su continuidad al menos tres años más. Su nicho de mercado es quizá modesto (programa en frontones alejados del circuito tradicional de pelota, en localidades de Castilla y León, La Rioja, Aragón y la Ribera navarra), pero ha sabido explotarlo, es rentable y no tiene problemas para programar partidos (el año pasado, uno de sus mejores pelotaris, Iban Otaegi, disputó 96 encuentros).
Garfe, que nació en 1998 y tiene su sede en Calahorra, guarda estrechas relaciones con Aspe. De hecho, no es extraño ver festivales conjuntos de ambas empresas.