Terminó la película. Como si, en efecto, lo que ha venido pasando por el Adarraga estos nueve días hubiera sido una película, los trofeos entregados a los finalistas parecían las famosas estatuillas de los Oscar. Dos para Titín y Fernando Goñi como ganadores, otras tantas parecidas a los perdedores, que fueron Olaizola I y Beloki y una más para el considerado el mejor de la feria, que se entregó a Titín, aunque éste tuvo el bonito gesto de entregárselo para que saludara con él como si quisiera dar a entender que en la consecución del premio recibido hubiera tenido participación el zaguero que le ha acompañado en los tres triunfos alcanzados que les han hecho subir al podio.
EDUARDO GÓMEZ/ La Rioja
Y no son pocos los que hubieran entregado el premio al de Zubiri, algo que en la tarde de ayer, tras la exhibición del de Tricio, tanto a la hora de ganar los tantos, como a la de defender, hubiera resultado impensable, pues sirvió lo que hizo el delantero campeón para diluir lo sucedido en partidos anteriores, no tan brillantes como el de ayer. Para un próximo torneo, acaso fuera conveniente que el trofeo fuera de dos piezas para darle una a cada miembro de la pareja ganadora si ambos han hecho méritos similares. Ayer hubiera venido de perlas.Y para terminar la feria, que económicamente ha sido un éxito, nuevo entradón que de nada servirá para que se acuerden los empresarios de venir pronto por aquí. Hay que confiar en que dado el número de partidos de los torneos que se avecinan nos veamos metidos en la ruleta del sorteo. Entre las notas agradables de la jornada de ayer figura el triunfo del najerino Del Rey en su quinta actuación en la feria. Jugó con orden, atacó al zaguero que acusó no encontrarse bien de la derecha y fue un activo colaborador para dar vuelta a un resultado muy adverso. Otro palo para la cátedra, aunque se repuso en el estelar, si bien la marcha del marcador en este partido les ayudó poco.