Estos días ha fallecido a los 90 años de edad Abbé Erramouspé, el único sacerdote pelotari que ha jugado un mundial, concretamente el de 1955 en Montevideo, Uruguay.
Abbé Leon Erramouspé nació en Les Aldudes en la Baja Navarra, muy cerca de la frontera con España. Abbé Erramouspé jugó el segundo mundial de la historia de la pelota vasca como delantero y acompañó a Henri Dunat que jugó de zaguero en la especialidad de mano parejas frontón. Ese año de 1955 quedó campeón de Francia en Plaza Libre, también con el mayor de los Dunat y después pasó a profesional. Cuentan los que le vieron jugar que aunque era cura en la cancha se comportaba como un auténtico diablo, tenía una espectacular volea que hacía las delicias del público y una gran defensa propiciada por su rapidez. Todos los partidos que disputó lo hizo con sotana, como se aprecia en la foto. En Francia jugó contra los más grandes como los Harambillet, Aguer Laduche (padre de Pampi) St Martin o Vivier, y en este lado de la muga se las vio con Miguel Gallastegui y los Atano.
Cuando era vicario en Itxassou construyó en 1952, con albañiles navarros, un frontón de 36m donde se celebra cada año la famosa «fiesta de la cereza» en junio.
Descanse en Paz Abbé Erramouspe.