Apenas ha comido en cuatro o cinco días, víctima de anginas. Notó buenas sensaciones ayer en la elección y dio el visto bueno
JOSEBA LEZETA./ Diario Vasco
Iñigo Leiza, enfermo con anginas durante varios días, se probó ayer en el frontón de Etxebarri durante la elección de material y dio el sí a su participación en el partido del Campeonato del Cuatro y Medio que le enfrentará a Xala mañana por la noche. «He peloteado y he tenido buenas sensaciones», apuntó el de Lemoa. «Sé que no voy a estar al cien por cien, pero prefiero jugar». A continuación efectuó un entrenamiento con Pablo Berasaluze.
Unas anginas habían impedido a Leiza alimentarse con normalidad y entrenarse desde el pasado viernes. Ha estado sometido a un tratamiento a base de antibióticos. La infección, que le ha afectado la boca y la garganta, ha castigado su organismo, si bien desde el martes por la tarde se encuentra mejor.
39,5º de fiebre
Iñigo Simón, médico de Asegarce, le ha tratado estos días. «Ha estado enfermo desde el viernes. Son unas anginas normales, nada que se salga de lo extraordinario, pero esta afección deja secuelas en el organismo durante unos días. Es lo habitual. Ha tenido 39,5º de fiebre durante varios días. El martes por la tarde ya le había remitido la fiebre y ayer se encontraba mejor que el día anterior. Pero lo cierto es que las anginas le han dejado hecho polvo».
El doctor Simón asegura que «ha perdido unos cuantos kilos, casi seis, respecto a la última vez que le pesamos, que fue hace un mes. Puede que en la preparación del Cuatro y Medio hubiera perdido alrededor de un kilo, pero no más. En todo caso, habrá perdido cinco kilos estos días, una cantidad importante para un pelotari que tampoco es excesivamente corpulento». El galeno calcula que Leiza puede recuperar un par de kilos, a lo sumo tres, en las horas que restan para la disputa de la eliminatoria contra Xala.
Iñigo Leiza no podía comer sólido y durante el fin de semana se alimentó gracias a una pajita.
Durante la elección de material de ayer por la tarde en Etxabarri, Iñigo Leiza tuvo la oportunidad de pelotear y de comprobar su estado físico. Su rostro, más pálido de lo habitual, denotaba el sufrimiento de los últimos días. Obtuvo conclusiones positivas, bajo la supervisión de Salva Vergara. Asume riesgos evidentes con esta decisión.
Este inconveniente convierte a Xala en más favorito, si cabe, para el partido que decidirá la primera plaza de cuartos de final. El ganador de Etxebarri se medirá a Rubén Beloki.
No satisfizo a Xala
La elección de material, por cierto, no satisfizo a Xala. Quería material de mayor viveza y rapidez. Gente presente en el frontón señaló que «muchas pelotas que ha probado el seleccionador botaban muy altas». Atano XIII pidió más pelotas a los intendentes para completar el lote. Tuvo más dificultades que por la mañana en Balmaseda.
Xala separó una pelota de 103.7 gramos y otra de 105.7. Una de ellas es de cuero vuelto. Iñigo Leiza se quedó con dos de 104.3 y 105.3 gramos.
El de Lekuine considera que ya ha cumplido con su victoria ante Patxi Ruiz y, de momento, no mira más lejos de su enfrentamiento con Leiza. Pese a los problemas de salud sufridos por su rival en los últimos días, dice que «no voy a confiarme. Sé que Leiza es un rival complicado, un buen especialista del cuatro y medio».
Xala apenas había dispuesto de tiempo para entrenarse dentro de la jaula antes de su debut en la competición. Después ha tenido dos semanas para afinar su puesta a punto. Pampi Laduche, su botillero, confesó que han acudido en dos ocasiones al frontón de Etxebarri, escenario de su partido. El martes, por ejemplo, estuvo en compañía de Arizmendi, el pupilo de Laduche que acaba de debutar en profesionales con Aspe.