Estos días Patxi Ruiz ha acusado a los jueces de ir a por él con motivo del famos atxiki del domingo en Bergara. Hoy en declaraciones a Tino Rey en El Correo el presidente de los jueces de la LEP.M José Mari Goikoetxea responde con contundencia al zaguero navarro.
«La polémica suscitada por Ruiz, en la propia cancha y sus reacciones posteriores, son desproporcionadas». Es una de las premisas que quiere dejar sentada la máxima autoridad de los jueces de pelota de Euskadi. Es más, va mucho más lejos en su particular apreciación sobre el caso: «Sus declaraciones son impropias de un pelotari de élite».
Aseguró que el juez que sancionó la volea al estellés, Tomás Lasarte, «es un trabajador que se gana el pan con el sudor de su frente, trabajando en una empresa a turnos partidos, y que actúa en el frontón con una independencia absoluta, y con unos emolumentos que sólo dan para pagarse el viaje al frontón y tomar una caña. Y tengo que decir al respecto que Tomas lo está pasando muy mal».
«Del dinero que cobramos por prestar nuestros servicios en los frontones no vivimos y puedo garantizar que nosotros no hacemos ningún tipo de acuerdo, como viene a asegurar el señor Ruiz, con pelotari alguno y mucho menos con los botilleros. Y ni siquiera tenemos relación con corredores de apuestas ni con empresas alguna», afirmó Goikoetxea.
A Patxi Ruiz NO es la primera que le lían los jueces. De echo desde que le «diagnosticaron» el primer atxiki, es al único pelotari que los jueces se atreven, siendo este, discípulo de Arretxe, uno de los que menos merecen este tipo de faltas.
Lo siento por el juez, pero las malas acciones hay que purgarlas, y no desde la prepotencia, ni desde el lloro porque «sólo le llega para una caña», sino desde la humildad porque a un pelotari le están haciendo polvo por una fama totalmente inmerecida.
Soy un aficionado muy veterano y en mi vida he visto de todo en los frontones. El atxiki que veíamos en tiempos de Arroyo («El panaderito de Oyón»), se desterró afortunadamente, ya que de no haber sido así la pelota habría degenerado hasta convertirse en un juego totalmente diferente.
En primer lugar, con referencia a la volea de Patxi Ruiz en su partido contra Olaizola II,no vi por más que repetí las imágenes de la jugada muchísimas veces,ninguna anomalía en su ejecución.Ya sé que no es lo mismo ver la jugada en el frontón que por televisión y que el juez está encima de la jugada, pero repito que no vi nada extraño.
Para terminar debo decir que resulta muy difícil determinar si una volea es o no atxiki y aún los más entedidos comentaristas tienen sus dudas en muchos casos, también decir que confío plenemente en la integridad de los jueces de pelota.