Olaizola II y Barriola se entrenaron en el Ogueta, adonde regresarán mañana para elegir
Diario de Noticias
Aimar Olaizola y Abel Barriola completaron ayer su último entrenamiento antes de la final. Acudieron al Ogueta y pudieron cruzarse en sus vestuarios, donde este domingo se pondrán los tacos para dirimir quién es mejor en una distancia que ya ha coronado a ambos. El leitzarra venció en 2001 y su rival ganó en 2002.
El primero en acudir a entrenarse fue Aimar Olaizola, que buscó un sparring de características similares a las de su adversario en la final. Patxi Ruiz, zaguero dotado de un saque rápido, similar al de Barriola, fue del encargado de darle velocidad a la pelota. El estellés es el último pelotari que sabe lo que es ganar a Olaizola II dentro del cuatro y medio. Lo hizo a comienzos del verano, en el Torneo de San Fermín, y su victoria le sirvió para clasificarse hasta la final del 7 de julio, que posteriormente ganó frente a Juan Martínez de Irujo.
Olaizola II y Ruiz jugaron un partidillo y permanecieron sobre la cancha del Ogueta durante una hora. Julián Retegui, director deportivo de Asegarce, estuvo presente también en el recinto de Mendizorroza.
barriola, a tope A continuación salió al frontón Abel Barriola, que se entrenó con Jokin Etxaniz de forma bastante intensa, durante casi hora y media. La prueba fue positiva. La derecha del leitzarra respondió sin problemas y las sensaciones resultaron inmejorables. Barriola llega al encuentro en un gran momento de juego. Su partido frente a Jorge Nagore le ha dado confianza y ha recuperado su derecha de forma plena. Ahora sólo falta que llegue el encuentro.
Los dos pelotaris están citados mañana a las doce del mediodía en el Ogueta para elegir el material. Todos los ojos estarán puestos en ellos y en la labor de Juan Mari Juaristi, el seleccionador.
sin entradas El Ogueta estará lleno hasta los topes este domingo. No cabrá ni un alfiler, porque las empresas han despachado en los últimos días las últimas entradas que quedaban por vender. El frontón vitoriano tiene un aforo para 2.095 personas sentadas. No todas se venden, porque hay que descontar al menos un centenar para medios de comunicación y compromisos empresariales. Sin embargo, al menos otras tantas se venden para el paseo de cancha. La recaudación, que Aspe y Asegarce nunca hacen pública, superará sólo en concepto de taquilla los 130.000 euros. La mayoría de los aficionados que se desplacen hasta el Ogueta el domingo llegarán desde Guipúzcoa y Navarra, que aporta a los dos finalistas. Apenas acudirá gente de Vitoria. La txapela se quedará en la Comunidad Foral por 15ª vez en 16 años.