La final del Berria Erremonte Txapelketa se disputará el sábado en Galarreta y los protagonistas han elegido el material con el que buscarán la txapela. Los primeros en saltar a la cancha fueron Kemen Aldabe y Oier Apezetxea. Jugarán de colorado, ya que no han perdido hasta la fecha ningún partido. Fueron rápidos y separaron cuatro pelotas que pesaron 125, 126, 127 y 129 gramos.
Les cogieron el relevo Julen Loitegi e Ibon Zaldua. Los pesos fueron idénticos; 125, 126, 127 y 129 gramos. Aunque el bolo era más grande por lo que las pelotas tienen que ser de algo más de bote que la de sus contrincantes.
Realmente las dos parejas buscaron pelotas parecidas y separaron casi el mismo material. Dos pelotas más vivas y otras dos diferentes para poder variar el juego. Ambas parejas se conocen bien, ya que este mismo partido fue el estreno de Apezetxea como profesional hace algo más de un mes. En aquella ocasión Aldabe y Apezetxea ganaron por la mínima, 34-35.
Los colorados quedaron satisfechos con un material donde no se nota mucho la costura según Aldabe. «hemos separado al inicio diez y después elegimos las cuatro, dos vivas y dos que no son ni vivas, ni secas».
En la liguilla el partido fue duro y son conscientes de la dificultad que entraña. «Serán rivales complicados». Como recuerda Apezetxea «les ganamos después de ir perdiendo 33-30. Les dimos la vuelta. espero un partido parecido y creo que será completo».
Los navarros afirmaron que los dos rivales están con juego. «Loitegi está con juego e imprime mucha velocidad a la pelota. Zaldua defiende mucho, los dos son buenos defensores».
Apezetxea tiene claro que será su partido más duro desde que es profesional. «Sin duda, pero también hay que tener en cuenta que tengo como compañero al mejor delantero de segunda. Eso sí, Loitegi está creciendo constantemente y Zaldua está en racha».
Más que buscar la debilidad del rival, Aldabe cree que el juego de uno mismo es el que hace que el contrario tenga debilidades. «Si le das a la pelota velocidad y .haces buena haces tantos. Nuestra fortaleza es la velocidad, aunque también defendemos».
Entrar bien la final será fundamental para Aldabe y Apezetxea. «Muy importante. Y sacar bien. Que la pelota entre bien en la cesta es fundamental». Aldabe piensa que habrá que calentar bien para no fallar al inicio, que es «cuando más fallos se cometen, antes de entrar en calor».
Los colorados tenían claro que los rivales elegirían un material parecido y así fue. Loitegi y Zaldua separaron cuatro pelotas con parecidas características. «Dos pelotas vivas y otras dos con algo más de peso. Son pelotas bonitas y hemos quedado a gusto» afirmaba Loitegi. Zaldua añadía que lo importante es que «nos sintamos cómodos con la pelota. Atacar cuando tenemos la oportunidad y disfrutar del juego. Eso es clave».
Los guipuzcoanos esperan otro partido duro como el de la liguilla. «Irá peleado e igualado» afirma el urnietarra Loitegi. «Ambas parejas llegamos en muy buen momento. Creo que daremos nuestro mejor nivel y eso hará que sea un partido igualado y duro», asegura el donostiarra Zaldua.
Las dos parejas son compensadas y son conscientes. «No tenemos puntos débiles claros, como podía ser en algunas otras parejas. Al inicio del campeonato s epodía pensar que Apezetxea podía ser el punto débil, pero el goizuetarra ha demostrado que de débil nada. Está dando el nivel».
Zaldua piensa que en los partidos igualados deciden los detalles, como en el de la liguilla. «Pueden caer a cualquier parte y hay que tener algo de suerte en esos detalles, que son decisivos».
Los azules saben que al ser otra pareja compensada, la clave estará más en el trabajo de uno, que en la debilidad del rival. «No tiene un fallo claro en su juego».
Fotos: Maialen Andrés