Gonzalez-Pascual quieren imponer su ritmo de juego para empatar los cuartos de final ante Irujo-Goñi III (Azkoitia, 23.00 horas, ‘ETB 1’)
P. A. / La Estafeta de Navarra
El Mano Parejas va quemando etapas, y esta noche vivirá el primer encuentro auténtico de campeonato. Tras perder la semana pasada ante Irujo-Goñi III (22-19), Gonzalez-Pascual no tienen más margen de maniobra que ganar hoy, en Azkoitia (23.00 horas, ETB 1). Si lo logran, forzarían un tercer encuentro de desempate. Si no, sus rivales se convertirán en la primera pareja que se cuela en las semifinales del torneo… y ellos, en los primeros eliminados.
Para Gonzalez-Pascual se trata de un todo o nada, aunque, como indica el zaguero, tienen esperanzas. «Es un partido muy complicado porque son una gran pareja, aunque yo soy optimista», dice Iñigo Pascual, que, no obstante, hubiera querido un material de más peso para este partido (junto a Gonzalez, separó pelotas de 103,6; 104,9 y 105,1 gramos; las de sus rivales dan en la báscula 104,1; 105,4 y 105,7 gramos). Tendrá además el hándicap de las características del frontón de Azkoitia, muy rápido para su gusto.
Con todo, el pelotari de Abárzuza espera ofrecer esta noche un alto nivel. Va a más conforme avanza el torneo, y el sábado pasado completó su mejor encuentro en este torneo: apenas concedió errores (a diferencia de lo que le pasó en la liguilla), hizo dos tantos (uno de ellos con una bonita dejada con la izquierda, en el rincón) y mantuvo una lucha equilibrada en la zaga con Goñi III. Él tiene su teoría al respecto.
El pico de forma. «La liguilla era un poco de entrenamiento, quien más quien menos se ha reservado. Lo lógico es estar bien ahora. Seguro que hay varias parejas que a partir de ahora darán su verdadero nivel», explica. En su caso concreto, espera dar mucho más de sí: «El otro día me vi bastante regular en el peloteo, pero lo mío es intentar romper el partido con la derecha. Está claro que a seguridad es muy complicado ganarle a Fernando Goñi. Gonzalez y yo lo tenemos claro, tenemos que romper el ritmo: yo pegar atrás y él acabar adelante».
Su mejoría ha sido evidente, pero Pascual no ha exhibido todavía su mejor arma, su potente golpe de derecha, en la que tiene molestias a causa de un callo. «Pero tendré que intentar dominar atrás», insiste el zaguero.
Suponiendo que él cumpla con su cometido, dominar a Goñi III, la lucha adelante también se antoja complicada para sus intereses. En el encuentro del sábado pasado, el delantero de Lapurdi se cohibió a la hora de entrar a rematar, todo lo contrario que Irujo. Pero Pascual confía en su compañero. «Es el primer campeonato que juega y creo que lo está haciendo bien. Quizá el otro día jugó más a no fallar, pero está cogiendo experiencia», asegura. A su juicio, Gonzalez debe asumir hoy más riesgos. «No podemos depender de los fallos de Irujo, porque también termina muchos tantos», concluye.