“Éste es un sueño hecho realidad”, afirmó un eufórico Xala
Ya en vestuarios, Xala estaba encantado por el éxito que suponía lograr el pasaporte para la final más importante del año: “Yo tampoco podía esperar ser finalista cuando la competición arrancó hace algunas semanas. Sólo era un sueño que afortunadamente se ha hecho realidad. Ha sido un partido muy duro, pero estoy muy contento. Aimar ha empezado muy bien, con golpe. Para el 10–9 estaba ya muy cansado, pero por suerte, me he podido volver a meter en el partido. Al final, con el 18–21, he sentido una gran presión, pero sabía que Aimar iba a intentar algo y he podido conseguir el tanto. No sé cómo lo he conseguido, pero el último tanto ha sido para mí. ¿Las manos? Tengo la derecha un poco cargado por entrar tantas veces de volea, pero creo que estaré en condiciones de jugar el día 6”.
Aimar Olaizola no podía esconder cierta decepción por haberse quedado a las puertas de su segunda final en el manomanista: “Es una pena porque he perdido una buena oportunidad, pero por lo menos, me voy dejando una mejor imagen que hace quince días. Ha sido un partido de mucha paliza para los dos. Él ha hecho méritos en momentos clave del partido y yo he hecho poco daño con el saque, pero bueno, al menos he demostrado que con tiempo para recuperarme del todo del brazo, puedo estar en más finales en el futuro”
«Se me ha ido la chispa en el brazo»
El goizuetarra no pudo con Xala, pero se marchó satisfecho con su rendimiento
Para muchos, la derrota de Aimar Olaizola resultó decepcionante, pero para el goizuetarra entraba dentro de la lógica. Al todavía subcampeón del Manomanista se le notaba cansado y corroboró su gesto con palabras. «Ha sido un partido muy duro. Nos hemos llevado una buena paliza los dos».
Aimar sólo piensa ahora en descansar para llegar bien al verano y en recuperar el tono que tenía en la pasada edición del mano a mano. «Primero habrá que ver cómo tengo las manos. El brazo lo he notado bien, pero la confianza que tenía el año pasado tarda en recuperarse. Para eso hace falta jugar y ganar muchos partidos. Pero tengo claro que lo he hecho bien. Si hace tres meses me dicen que iba a estar peleando en las semifinales, me hubiera echado a reír».
Olaizola II reconoció la superioridad de su rival y explicó las claves de su derrota. «A medio partido me ha cogido ventaja y me ha costado mucho recuperar. Lo he intentado con saque-remate, que ya lo tenía pensado, y en el último tanto lo he podido hacer, pero he fallado y me ha ganado».
El inicio fue muy esperanzador para el goizuetarra, pero después se desinfló. «He comenzado bien, pero luego he tenido un pequeño bajón. En el brazo se me ha ido la chispa, pero al menos he conseguido dar otra imagen y me he quedado contento con el partido que he hecho. Ha habido tantos en los que los dos hemos terminado reventados, pero luego he bajado un poco el pistón. He visto que no le daba como al principio y he jugado con la izquierda, pero hago más regalos que el año pasado. Quería forzarle para que no entrara de aire, pero no he podido. Y es que a Xala le he visto bastante mejor que contra Eugui». Sobre la final, Aimar dijo: «Habrá que ver cómo juegan los dos porque ambos han hecho partidos en los que han cometido varios errores».