Titín y Lasa vencieron a Bengoetxea VI y Beloki después de remontar un 9-17 adverso
Una misa por ‘San Titín’. Eso le debe el de Tricio a su santo. Anoche se les apareció al caracolero y a Lasa el espíritu de la fortuna porque perdían 9-17 ante Bengoetxea VI y Beloki y dieron la vuelta para terminar 22-18. A alguno le escocerán los ojos de tanto frotárselos porque en el transcurso del partido pasaron, como en las buenas obras de teatro, tres actos bien diferenciados.
NAFARRATE / La Rioja
En el primero, el del desarrollo, Bengoetxea VI y Beloki dieron una lección de pegada. El de Burlada se puso tibio de soltarle a la pelota con un material que le encajaba en la mano como un guante. Bengoetxea, muy práctico y efectivo, despejaba el peligro a la zaga a la mínima con eficacia y agilidad.
Adelante, un Titín muy flojito, no disfrutaba del partido. Era sistemáticamente eludido y cuando enredaba, lo hacía con escasa resolución y criterio. Beloki arrollaba con sus pelotazos y Lasa, bien en defensa, erraba las pelotas más fáciles con escapadas impensables. El tanteo se puso 3-9 y el público empezaba a retorcerse en los asientos.
Bronca
En el siguiente acto, el nudo de la obra, aún fue peor para los intereses del riojano. Ya desesperado -a Titín no le gusta perder ni a las canicas- el de Tricio empezaba a quejarse del material, aunque la impresión general fue que tampoco el suyo lo movían con la misma soltura que los rivales, pero el caso es que después de jurar en hebreo, el riojano se encontró con un 9-17 en contra y se metió en los vestuarios hecho una antorcha humana dando un porrazo a la puerta y con un lenguaje corporal más que expresivo. Arrojó la pelota con violencia al rebote y el público estalló. Titín había ganado el tanto de pasada por la pared al quedarse Beloki corto de recorrido.
Titín la armó gorda y el público se alió con el riojano, cuando vio a éste a punto de claudicar. No tardó el riojano en salir del vestuario. Cualquiera le pide dinero en ese momento. Se fue al cestaño. La feria se tambaleaba y los empresarios temían la debacle.
El desenlace
Sólo falta el desenlace, que es el tercer y último acto de esta interesante obra. Bengoetxea falla en el ancho, Beloki tira dos pelotas seguidas, una de escapada y otra al pegar alto. Lasa se destapa con un pelotazo, Beloki vuelve a mandar la pelota arriba y Titín anota un saque: 15-17.
El público hervía. Mira por donde, el de Tricio se mete en el partido. O quizá Bengoetxea y Beloki empezaron a pagar el miedo escénico en el ‘maracaná’ riojano. Pero Beloki, pletórico de pegada, – y decían que no estaba bien- volvió a soltar un latigazo. Era el 18.
Titín, prácticamente inédito, se aseguró una carambola con efecto en el tanto siguiente. Era su cuarta diana a esas alturas. ¿Un saque! Al de Leiza se le fue una pelota arriba. Empate. ¿Otro saque! Titín maniobró de dejada al choco después de un formidable intercambio y… ¿nuevo saque! El frontón bramaba. El riojano conectó una dejada a la que Beloki llegó tarde y Bengoetxea tiró la última. Sorpresón mayúsculo y final feliz para el riojano.
LA FICHA
Tantos de saque: 4
Faltas de saque: 0
Tantos en juego: Titín, 6; Lasa, 1
Tantos perdidos: Titín, 5; Lasa, 5 Tantos de saque: 0
Faltas de saque: 1
Tantos en juego: Beng., 3; Beloki, 5
Tantos perdidos: Beng., 4; Beloki, 6 Tiempo de juego: 72 minutos. Pelotazos a buena: 678. Momios de salida: 100-30 por Titín. Cancha: Adarraga. Público: El Adarraga presentó un llenazo para ver a Titín. Marcador: 0-5, 1-5, 1-6, 2-6, 2-7, 3-7, 3-9, 4-9, 4-10, 5-10, 5-12, 6-12, 6-14, 9-14, 9-17, 15-17, 15-18 y 22-18. Incidencias: Era la primera vez que Titín y Bengoetxea VI se enfrentaban. Incidencias