El zaguero azkoitiarra ganó en su reaparición en el Labrit, tras casi diez meses alejado de las canchas
JOSEBA LEZETA/ Diario Vasco
Jokin reapareció el lunes por la noche, ya de madrugada, en el Labrit de Pamplona y lo hizo con victoria. Koka y el zaguero de Azkoitia derrotaron a Nagore y Elkoro por 22-18. El resultado era secundario para Errasti. Él quería probarse, sentirse de nuevo dentro de la indumentaria del pelotari y comenzar a extraer conclusiones. Se ha marcado un plazo de tres meses para evaluar su estado y decidir si continúa como pelotari profesional o toma el camino de la retirada.
-¿Cómo se encontró en el partido de su reaparición?
-Estuve correcto, sin grandes maravillas. El partido resultó largo, bastante duro y hacia el final acusé el trote. Físicamente me sentí cansado en los últimos tantos. Hasta el tanto doce, trece o catorce aguanté bien, pero coincidió que me tocó moverme bastante en algunos tantos, hice bastante esfuerzo en los desplazamientos y después anduve asfixiadillo en algún tanto.
-¿Respondieron bien el hombro y la rodilla que le han dado problemas?
-La rodilla no me dio ningún problema. En el hombro noté ligeras molestias, pero nada importante. Creo que las lesiones están completamente superadas y no van a resultar ningún impedimento para que yo pueda jugar a pelota.
-¿Se ha marcado un plazo para comprobar su estado físico?
-Sí, este verano. Me he puesto un límite de dos o tres meses para comprobar si puedo rendir al nivel que yo mismo me exijo, es decir, en condiciones de jugar buenos primeros partidos y algún estelar. Si hasta septiembre todo rueda bien y veo que mejoro según avanza el verano, seguiré. Si sigo con problemas y no puedo conservar ese nivel de juego, si no me siento capacitado para ese tipo de encuentros, me retiraré. Confío en coger el ritmo poco a poco, según voy disputando partidos.
-Con su veteranía, supongo que no saldría nervioso a la cancha en su reaparición…
-Ya me lo decía Ladis Galarza hace tiempo: ‘Cuanto mayor eres, más nervioso sales a la cancha. Sales cagado al frontón’. Me reía, pero no le faltaba razón. Después de tanto tiempo sin jugar partidos, sales preocupado, más nervioso que nunca. Eso es algo que nunca puedes evitar por mucha experiencia que tengas.
-¿Cuántos partidos puede afrontar a la semana?
-Hombre, yo creo que no estoy para disputar tres en una semana, pero tampoco me he marcado un máximo. Jugaré en función de los festivales que programe la empresa. Me han puesto el segundo partido este domingo en Amorebieta. Es un buen estelar: Berasaluze VIII y Zearra contra Aimar Olaizola y yo. Tengo que agradecer a la empresa que me ponga este tipo de encuentros.
-¿Qué ha echado de menos el tiempo que ha permanecido alejado de las canchas?
-Sobre todo, el ambiente del vestuario, antes y después de jugar los partidos, así como las cenas que organizábamos de vez en cuando. Es el ambiente en el que te has habituado a vivir durante dieciocho años y cuesta verte lejos de él, sin saber cuándo vas a regresar a ese vestuario. Afortunadamente, todo ha pasado y he vuelto a coger la bolsa.
-¿Cuándo expira su contrato con Asegarce?
-En marzo del año próximo. Pero si me veo mal, no esperaré hasta entonces para retirarme.
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